viernes, 26 de octubre de 2007

Vacaciones 2007 - Capítulo 7: Campos de Córdoba


El Guadalquivir

Esta parte es muy breve, ya que de camino a Huelva sólo nos podíamos permitir dos paradas cortas.

La primera de ellas en Medina-Azahara, la que fuera la ciudad palatina de los califas. Fue un poco complicado llegar, dado que las cartografía del navegador no coincidía del todo con el mundo real, y se empeñaba en llevarnos al aeropuerto y coger un desvío inexistente poco antes de llegar. Al final nos metimos por un polígono y conseguimos llegar a la carretera de Palma del Río. Llegamos enseguida al punto de parada, pero para nuestra desgracia los lunes era festivo... y era lunes. Estiramos un poco las piernas y pusimos rumbo a la siguiente parada, no sin antes detenernos un momento a contemplar unos toros de lidia que pastaban plácidamente al lado de la carretera.

Camino de Almodóvar del Río vimos una columna de humo a lo lejos, y al poco rato la policía tenía cortada la carretera, al parecer por un incendio en alguna instalación industrial, porque de hecho el humo se veía muy lejos. Total que dimos la vuelta, como todos, y me puse a seguir a otros coches. Enseguida se desviaron de la carretera y yo los seguí. Nos metimos en una barriada humilde de casas bajas llamada Los Mochos (creo), y al poco rato divisamos Almodóvar del Río.

Nuestra parada era en el castillo, en lo alto de un cerro, y el navegador nos hacía ir por estrechas y empinadas calles. Por momentos pensé que nos atascaríamos en alguna de ellas. Una vez arriba comprobamos que la visita era de pago, y como nos llevaría un mínimo de una hora y aún nos quedaba mucho camino, decidimos no entrar y disfrutar un rato del paisaje antes de volver a enlatarnos en el coche.

La verdad es que había poco que mirar por lo que la parada fue muy breve, y enseguida estábamos otra vez en ruta, esta vez sin cruzar el pueblo. Ciertamente Andalucía es grande, y el problema que le encuentro es que para ir de un sitio a otro en muchas ocasiones hay que cruzar Sevilla. Tampoco es que fuera un problema porque la cruzamos en pocos minutos, pero como que se te hace más pesado...

Si bien la carretera de Córdoba a Sevilla es una buena autovía, de Sevilla hacia la Sierra de Aracena comienza como autovía y acaba como una simple nacional. El tráfico de camiones es importante dada la proximidad con Portugal, pero hay muchos tramos con carril de vehículos lentos. El paisaje es muy agradable, y con el sol tan bajo aún más. Además, como íbamos hacia el oeste, teníamos la puesta de sol todo el rato frente a nosotros... y he de decir que era preciosa, pero bueno, esto lo explicaré otro día.

Aquí podeis ver mis mejores fotos de los campos de Córdoba.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Conocía tus fotos a través de flickr donde tengo las mías como "marathoniano".
He descubierto tu blog y me encanta como aficionado a los viajes. Soy nuevo en esto del blog, y abrí uno sobre viajes hace un mes. Ya iremos intercambiando información. Añadiré el tuyo tan extraordinario a mis enlaces.
Saludos
Ramón.